Pollo rebozado Àvia Maria
La cocina de las abuelas. Un título que bien podría servir para un best seller gastronómico y que resume, sin necesidad de muchas más explicaciones, un saber y experiencia de un valor incalculables. Ojalá fuera sencillo recoger este conocimiento en algún medio que permitiera conservarlo indefinidamente, poderlo consultar cuando fuera necesario y reproducirlo a la perfección. Desgraciadamente, la cocina es algo más que un conjunto de ingredientes y técnicas de elaboración y cocción. La cocina también es amor y eso, consciente o inconscientemente, lo tenían claro nuestras abuelas. Algo imposible de cuantificar y parametrizar para reproducirlo en serie.
En mi caso particular, hay una receta que está tan ligada a mi abuela Maria que no podía darle otro nombre que no fuera el de pollo rebozado Àvia Maria (àvia significa abuela en catalán). Con el perdón de todas aquellas personas que, como yo, disfrutaron de esta deliciosa comida durante su infancia. La receta no tiene mucho misterio y su sencillez es un reflejo del tipo de cocina que practicaban muchas de nuestras abuelas los días de cada día. Hacer las cosas simples y fáciles suele llevar tiempo, a diferencia de lo que algún ignorante bienintencionado pueda pensar. Lo más difícil es hacer las cosas realmente fáciles. Y la receta de este pollo rebozado es un ejemplo. El hecho de macerar los filetes de pollo con el jugo de limón permite romper las fibras del pollo y que sea más tierno, la canela molida ayuda perfumar la carne y la fritura final, una cocción breve en aceite de oliva bien caliente, permite conseguir una textura melosa y para nada seca. Un proceso que, bien reflexionado, tiene sentido, aunque nuestras abuelas lo hicieran tan fácil y con tan amor que no les hiciera falta parar a pensar ni un momento en todo estas elucubraciones.
Ingredientes para 2 personas
1 pechuga de pollo en filetes muy delgados (aprox. 6 filetes)
1 limón
Canela en polvo
Harina
1 huevo
Sal
Pimienta negra
Aceite de oliva virgen extra
Preparación del pollo rebozado Àvia Maria
- Salpimentar los filetes de pollo, añadir un poco de canela en polvo y dejarlos macerar con el zumo del limón durante 1 hora.
- Pasado este tiempo, enharinar los filetes de pollo macerados, pasarlos por huevo batido y freír en abundante aceite de oliva hasta que estén dorados, poco menos de 1 minuto por cada lado. No hay que freírlos mucho porque son muy delgados y se hacen enseguida.
- Dejar reposar los filetes de pollo rebozado sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Si te ha gustado la receta del pollo rebozado Àvia Maria
tal vez te gustará también la receta de la pastela marroquí de pollo y almendras. ¡Anímate a probarla! 😉