Mona de Pascua de chocolate
Del mismo modo que la tradición cristiana celebra la llegada de la Cuaresma, época de abstinencia y penitencia, comiendo todo lo que no se podrá comer durante cuarenta días y, a ser posible, a la vez, como la tortilla de butifarra de huevo o la coca de chicharrones en Catalunya por ejemplo, dicha tradición religiosa también despedía estos días pesados, como mínimo gastronómicamente hablando, con un buen pastel, el cual, tradicionalmente, llevaba huevo duro y longaniza seca. Hablamos de la Mona de Pascua, un dulce que ha ido variando a lo largo del tiempo tanto en su composición como en su decoración. La tradición en Catalunya mandaba que el padrino regalara una mona a su ahijado con tantos huevos duros como años tuviera el pequeñito hasta llegar a los 12 años.
Las monas primigenias eran mucho más básicas y no dejaban de ser una especie de cocas decoradas con huevos duros. Una tradición, datada ya en el siglo XV, que poco a poco se fue consolidando y fue cogiendo importancia hasta llegar al siglo XIX, momento en que las Monas se empiezan a perfeccionar de la mano de los pasteleros y chocolateros. Hoy en día, encontramos una gran variedad de Monas de Pascua: las todavía tradicionales monas de brioche con huevos duros (si bien el huevo duro ha quedado como elemento simbólico más que una representación de la edad del ahijado), monas de chocolate, tipo Sara o, incluso, representaciones figurativas espectaculares hechas sólo con chocolate. De todas ellas, la Mona de Pascua de chocolate aún guarda un lugar destacado en el recetario popular y doméstico de bastantes familias, entre las que se incluye la mía, que prefieren elaborar este pastel en casa. Una manera para despedirse de la Cuaresma para algunos, y lo que esto significa, o, sencillamente, para pasar un buen rato juntos, en familia.
Ingredientes para 4 personas
1 bizcocho casero de unos 500 g
200 g de mermelada (de fresa, melocotón o la que guste más)
PARA LA TRUFA DE CHOCOLATE:
200 g de nata líquida para montar (35% MG)
80 g de chocolate 70%
20 g de azúcar
PARA EL ALMÍBAR:
60 g de azúcar
60 g de agua
15 g de licor (ron, brandy, cointreau, whisky,…)
PARA EL BAÑO DE CHOCOLATE (GANACHE):
150 g de chocolate de cobertura 70%
150 g de nata líquida para montar (35% MG)
30 g de mantequilla
PARA DECORAR:
100 g de fideos de chocolate
1 huevo de chocolate
1 figurita de chocolate
Plomas de colores
Pollitos
Lacasitos
Preparación de la Mona de Pascua de chocolate
- Para preparar la trufa de chocolate, se tiene que hacer unas horas antes o de un día para otro para que, cuando la vayamos a montar, esté bien fría y se monte mejor. Para hacerla, calentar la nata y el azúcar en un cazo y, cuando rompa a hervir, apagar el fuego. Poner el chocolate en un bol de acero inoxidable y añadir la nata calentada con el azúcar. Mezclar bien con una espátula hasta que el chocolate se haya deshecho y obtengamos una textura lisa y homogénea. Dejar enfriar a temperatura ambiente, tapar con papel film y guardar en la nevera hasta el momento de usarla. Cuando la queramos usar, montar la trufa de chocolate con las varillas de la batidora eléctrica, incrementado poco a poco la velocidad de la batidora. Una vez montada, reservar en la nevera.
- Para preparar el almíbar que usaremos para remojar el bizcocho, poner el azúcar y el agua en un cazo. Calentar y, cuando empiece a hervir, dejar cocer 3 minutos hasta que alcance la temperatura de 101 ºC (se puede medir con un termómetro de cocina o apagar el fuego al cabo de 3 minutos). Apagar el fuego y dejar enfriar a temperatura ambiente. Cuando esté templado, añadir el ron, remover y reservar.
- Para hacer el baño de chocolate (ganache) que utilizaremos para cubrir nuestra mona de pascua de chocolate, mejor primero picar ligeramente el chocolate de cobertura 70% para hacer trozos pequeños (si no disponemos de gotas de chocolate) y tener la mantequilla que utilizaremos a temperatura ambiente. Empezar calentando la nata líquida en un cazo. Cuando esté a punto de hervir, apagar el fuego. Poner en un cuenco los trozos de chocolate, añadir la nata líquida caliente y mezclar con una espátula hasta que todo quede bien integrado. Añadir la mantequilla cortada en trocitos en dos tandas, integrándola bien después de cada tanda. Si la ganache se corta, añadir un chorro pequeño de nata o agua y mezclar hasta ligarla de nuevo. Reservar la ganache en un baño maría suave para mantenerla caliente y conseguir que esté bien líquida en el momento de utilizarla.
- Una vez tengamos todos los elementos de nuestra mona de pascua de chocolate preparados, ya podemos empezar a montar la mona.
- Cortar el bizcocho en tres pisos.
- Mojar el primer piso con el almíbar con la ayuda de un pincel y untar con la mermelada.
- Poner encima el segundo piso, mojarlo también con almíbar y untarlo con la trufa de chocolate.
- Poner encima el tercer piso, mojarlo con el almíbar y cubrirlo con el baño de chocolate. Debe quedar bien cubierto, tanto por encima como por los lados. Una manera para que quede bien es poner la mona encima de la rejilla del horno, poner debajo un plato o bandeja para recoger el chocolate que vaya cayendo, e ir tirando el baño de chocolate por encima sin miedo. De esta manera quedará bien cubierta y podremos recuperar el baño de chocolate que vaya cayendo. Si lo hacéis así, probablemente os quedará el baño bien liso y brillante y no necesitaréis una espátula para alisarla. Si deseáis que la capa de chocolate sea más contundente, dejar enfriar la primera capa y formar una segunda encima.
- Cuando hayamos terminado de bañar la mona de pascua de chocolate, dejar reposar unos minutos para que el baño de chocolate se enfríe un poco y pegar por los lados los fideos de chocolate.
- Decorar la mona de pascua de chocolate con el huevo de chocolate, la figurita, las plumas, los pollitos y algunos lacasitos de colores.
Si te ha gustado la receta de la Mona de Pascua de chocolate
tal vez te gustará también la receta de los panellets. ¡Anímate a probarla! 😉